¡Con ésta receta vais a triunfar seguro!
– 4 patatas medianas
– aceite de oliva
– sal y pimienta
– una cucharadita de pimentón dulce
– una cucharadita de ajo en polvo
– una cucharadita de cebolla en polvo
– una cucharadita de romero en polvo
Hervimos las patatas enteras hasta que estén bien blanditas pero no se nos deshagan o al partirlas se nos desmenuzarán.
Partimos las patatas longitudinalmente y las vamos troceando en cuartos hasta tener forma de gajos o medias lunas.
En un cuenco las mezclamos un poco de sal y pimenta, el ajo, cebolla, pimentón y el romero y añadimos las patatas. Les damos un par de vueltas para que se impregnen bien de las especias y las freíamos en aceite bien caliente. Las dejamos escurrir en un colador.
Para hacer la salsa ranchera mezclamos un yogurt vegetal sin azúcar con una cucharada de vinagre de manzana o vino blanco, dos de mayonesa vegetal, dos dientes de ajo pequeños, una cucharada de perejil fresco, una cucharada de cebollino fresco,una cucharadita de cebolla en polvo y una pizca de sal y pimienta. Trituramos bien con la ayuda de la batidora hasta que no tengamos ningún grumo y la probamos para rectificar de sal y pimienta si fuera necesario.
Servir las patatas calientes con su salsa al lado para mojar y listos.
Truquillo:
– Si quieres que ésta receta sea más saludable, añade un par de cucharadas de aceite de oliva a la mezcla de especias y luego añade las patatas y remueve para que se impregnen bien. Prepara una bandeja de horno con papel antiadherente y pon las patatas encima. Hornéalas hasta que estén doradas por los dos lados removiendo de vez en cuando
– Si vais a preparar ésta receta con previsión, podéis dejar las patatas cocidas el día anterior y guardarlas en la nevera hasta que las vayáis a cortar. Tendréis la mitad del trabajo hecho y estarán bien frías para manipularlas sin quemaros los dedos.